Los monos.
Acariciándose y limpiándose la piel, los monos que viven en
grupos se transmiten sentimientos cálidos y amistosos para lograr una
convivencia pacífica y placentera.
No solo a través del tacto se comunican los monos. Con sus
gargantas producen una gran variedad de sonidos como: gruñidos, llantos, gritos
y ruidos que trasmiten diferentes mensajes.
A veces, un macho y una hembra que quieren acercarse reducen
tensiones limpiando juntos la piel de sus crías.
Al acercarse a un individuo con intenciones pacíficas,
abren y cierran rápidamente la boca para hacer chasquear sus labios. Cuando los
animales están en reposo, dejan la boca ligeramente abierta. Aprietan los
labios cuando están concentrados. Si invitan a jugar a un compañero, procuran
siempre ocultar sus dientes para evitar que sus acciones sean interpretadas
como una amenaza.
En esta imagen, podemos ver al mono haciendo un saludo amistoso.
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